En este curso escolar 2017/2018, decidimos apoyar un proyecto local en el colegio de La Gloria en Vélez-Málaga. Anteriormente ya habíamos financiado materiales, pero esta vez la idea era implicarnos y mantener un proyecto en el tiempo.
El comienzo pareció fácil, ya que gracias a la Obra Social de Caixabank de Caleta de Vélez, contábamos con financiación para el primer trimestre. Posteriormente resultó difícil darle forma para llevarlo a cabo. Pero nuestro empeño desde la Asociación, las necesidades del Centro Educativo y las ganas de la Educadora Social con la que íbamos a contar para el desarrollo del proyecto, promovieron que éste saliera adelante con gran éxito. Tanto fue así, que después de tres meses, de nuevo la Obra Social apostó por continuar el camino iniciado (desde aquí damos las GRACIAS).
Hemos visto cómo ha merecido la pena, sobretodo después de nuestro encuentro con nuestra querida amiga y colaboradora Sandra, la Educadora Social que ha hecho realidad en este curso un Proyecto Social muy bonito y con mucho cariño.
Este Proyecto consiste en ofrecer a los chicos y chicas del colegio, un lugar de tranquilidad, escucha y consejo. Y no es que en clase los docentes no se lo den, lo difícil es hacerlo cuando los niños/as se contagian de otros/as y a veces no son capaces de abrirse frente a sus compañeros/as (ya todos/as sabemos la fuerza que hace el grupo).
Sandra, gracias al espacio que ha ido creando y al hacer uso de alumnos/as ayudantes/as mediante la Patrulla de la Paz, ha conseguido que los chicos/as abran su corazón, confíen en ella y sean capaces de descubrir que cuando acarrean vivencias difíciles y tienen problemas, pueden liberarse sin necesidad de agredir, insultar o provocar una pataleta.
Lo más importante en estos meses ha sido mantener contacto individualmente, transmitiéndoles cariño, consuelo, escucha, dotarles de valores… tratando de echar abajo hábitos destructivos, comportamientos disruptivos y vidas desordenadas. Los resultados van a ser difíciles de ver a corto plazo, pero estamos seguros que se conseguirán. Más si se tiene a personas entregadas como Sandra, una chica que ama lo que hace y tiene claro que la esperanza está en las personas que creen en el cambio. Así lo sentimos también en ADAPA. Pensamos que las cosas van a cambiar gracias a la gente que actúa con la mano en el corazón. Gracias a esas personas guerreras que no se rinden ante las adversidades, y que se mueven sin esperar nada a cambio, poniendo el ahínco y constancia necesarias para que la vida continúe con un poquito más de valor.
Memoria de actividades ( https://drive.google.com/file/d/1u3NJhsxTv5V4WzTE8clRHiBhENy5Nfvd/view?usp=sharing )
Deja un comentario